Cuando tienes a tu primer hijo, el tema de la pieza y el espacio muchas veces se resuelve fácilmente. Puedes destinar un lugar para él o ella, sus cosas, sus juegos y su cama. ¿Pero qué pasa cuando llega el segundo y no hay más habitaciones disponibles?
Este es un tema que, estoy segura, a muchos les afecta. Y como no queremos que la pelea por la pieza se transforme en una verdadera guerra civil al interior de tu casa, te dejo estos consejos.
1.- Almacenamiento:
Sea un espacio grande o uno pequeño, asegúrate que cada uno de los niños tenga un lugar para guardar sus cosas, sus juguetes, artículos escolares, libros o adornos. Puedes buscar un espacio junto a la cama, a los pies de ella o en un muro que tengas libre.
2.- Personalización:
Haz que cada uno de tus hijos se sienta especial. Para eso, personaliza un espacio de la pieza con algo que los identifique y defina su espacio. Puedes tomar como ejemplo estas letras con los nombres de cada niño.
3.- Una base neutra:
Si las edades de tus hijos son distantes, entonces mi consejo es que busques un estilo decorativo neutro. Esto lo puedes lograr fácilmente escogiendo colores como el blanco o gris e ir personalizando con detalles.
Así, a medida que vayan creciendo, la pieza seguirá siendo atractiva para ellos, sin importar la edad o cuántos años de diferencia se lleven.
4.- Punto de encuentro:
Si por el contrario, tus hijos tienen edades y gustos parecidos, entonces conversen y lleguen a un consenso. Busquen aquellos elementos que le gusten a ambos y decoren con ellos la pieza. Será un lindo punto de encuentro.
5.- El clóset:
Tal como en el resto de la habitación, el espacio del clóset debe estar bien definido. Cada niño debe tener un lugar determinado en él, ojalá con cajoneras y colgadores iguales. Así evitarás peleas por la ropa y el desorden.
6.- Separadores de ambientes:
Si crees que tus hijos necesitan su espacio, pero es imposible que cada uno tenga su pieza, los separadores de ambientes son una buena idea. Mi consejo es que busques biombos o telas que se abran y cierren fácilmente. Incluso puedes ponerle cortinas a cada una de las camas, para crear un “fuerte” a prueba de hermanos. De esta forma cada uno tendrá su espacio cuando lo necesite.
Espero que estos consejos te hayan sido útiles.
Un abrazo!
Cony