La pieza de los niños a veces puede ser una pequeña jungla dentro de tu casa. Libros, juguetes, lápices y ropa por todos lados… Parece que es un caos inevitable, y hay quien se resigna, aunque lo sufre. Sin embargo no tiene por qué ser así. Con unos cuantos trucos puedes conseguir que la pieza de tus hijos esté siempre ordenada… y además ¡por ellos mismos! Sólo tienes que conseguir que ordenar sea parte del juego y afilar el ingenio para que cada cosa tenga su sitio. Si implementáis este orden juntos se convertirá en una rutina entretenida y no en una orden o una tarea impuesta. Aquí tienes algunos consejos:
1.- Aprovecha el espacio debajo de la cama
Si tienes una cama tradicional no dejes que el espacio de debajo se convierta en el hogar del monstruo que se come los calcetines. Hazte con unas cajas plásticas y aprovéchalas para guardar, por ejemplo, ropa de otras temporadas. Si tienen ruedas serán mucho más fáciles de mover y como están en el suelo tus hijos podrán acceder a ellas siempre que quieran. Por eso también son una excelente opción para guardar juguetes.
Si prefieres muebles de doble uso, como las camas con estructuras que tienen cajones incorporados o las que se levantan, tendrás espacio de almacenamiento en el mismo espacio que ocupa una cama. Perfecto para almacenar las sábanas, frazadas, almohadas y los plumones.
2.- Utiliza los muros
Aunque la pieza tenga poco espacio real siempre podemos apoyarnos en los muros para decorar y ordenar. Puedes aprovechar distintas alturas para hacer más o menos accesibles las cosas para tus hijos. Las repisas y estanterías son una buena idea para colocar juguetes y libros que quieras que estén a la vista o más a la mano.
También puedes utilizar ganchos y colgadores para que tus hijos dejen sus mochilas ¡e incluso sus disfraces!
Los muros de la pieza pueden ser también el mejor expositor para sus obras de arte ¡Quedan estupendas!
Y detrás de la puerta puedes colocar un zapatero para que guarden las muñecas y peluches ¿se te había ocurrido?
3.- Los modulares, los cestos y las cajas son la clave
Los modulares sin duda son tu mejor aliado para la pieza de los niños porque te permiten tener distintos huecos para organizar en muy poco espacio.
Ayúdate de cestos y cajas. Los cestos son buenos para cosas que se utilicen con regularidad, porque al estar abiertos atrapan más polvo. Las cajas son mejores para material de papelería y juguetes con piezas más pequeñas, como los lego. Intenta que las cajas sean transparentes para que tu hijo pueda ver lo que hay en cada una sin necesidad de abrirlas. También que no sean demasiado profundas si van a contener piezas pequeñas porque se irán todas al fondo y para llegar a ellas tendrán que sacarlo todo.
4.- Usa colores
Para tus hijos será mucho más entretenido ordenar si se ayudan con colores. Les será más fácil recordar dónde va cada cosa. Por ejemplo, el material de pintar va en la caja verde, los autitos en la roja y los peluches en la azul. Pueden organizarse como les resulte más sencillo. Pregúntale a tu hijo y hazle partícipe de las decisiones para que se comprometa y lo sienta como una tarea suya.
5.- Crea rinconcitos de trabajo
Aunque sean pequeños es bueno que los niños tengan rincones para leer, pintar o hacer sus tareas. Estos mini estudios pueden ser también puntos de reunión si vienen amigos. Con una mesita baja con sillas pequeñas, un pizarrón o una pequeña butaca y una luz está listo. Les servirán, por ejemplo, para hacer manualidades mientras toman once.
Si tu hijo prefiere entretenerse cada día en un lugar distinto de la casa puedes ayudarle ordenando sus materiales en un carro con ruedas. Coloca ahí todo lo que necesite y así estará siempre disponible y a la vez ordenado.
Si les ponemos las cosas más fáciles a los pequeños de la casa ordenar nunca más volverá a ser un problema.