Si trabajas desde casa seguro que ya te has dado cuenta de dos cosas: la primera, que quedarte en pijama todo el día no es una buena idea (aunque al principio lo parezca) y la segunda, que cualquier espacio no te sirve para concentrarte.
Ocurre que, aunque vivas solo, los rincones de casa inspiran a hacer cualquier otra cosa que no sea trabajar. Porque, está bien, aunque tu computador sea tu única herramienta, uno puede estar un rato sentado en la cama, otro rato en una banqueta en la cocina, otro rato en el sofá… y así ir rotando por toda la casa. Pero lo cierto es que ser nómada laboral en nuestra propia casa nos hace menos productivos, nos agobia y además acaba un poco con el encanto del hogar.
Por eso lo mejor es habilitar un espacio específicamente para trabajar. Pero, ¿Qué pasa si no tenemos sitio? En realidad, aunque no lo creas, para crearte un taller, un espacio de trabajo o estudio, no necesitas mucho. He recopilado para ti una galería de oficinas en espacios pequeños e inesperados ¡Seguro que te inspiran!
Dentro de un armario
Entre dos columnas
Escritorio de pared
Bajo la escalera
En el entretecho o buhardilla
En el balcón
En tu dormitorio o el living
En un lugar de paso