Gracias Sr. Edison, pero nos quedamos con los LED

La tecnología avanza por momentos y a veces no nos da tiempo ni a adaptarnos a una nueva cuando ya está llegando la siguiente. Esto ocurre desde que las cosas se diseñan con una vida útil programada. Queremos que los nuevos productos sean más eficientes (es decir, que resuelvan más rápido y mejor), que tengan un diseño atractivo y también precios asequibles, porque nos hemos acostumbrado al cambio.

Si hablamos de muebles y decoración, es cierto, antes se compraba una mesa de centro y era para toda la vida. Hoy amamos los muebles multifunción y no sólo estamos dispuestos a cambiar la decoración del living por completo de un día para el otro, sino que somos capaces de cambiarnos de departamento, de barrio y hasta de país para empezarlo todo desde cero.

Sin embargo, en este mundo de cambios constantes, hay un producto que se ha diseñado para durar más! Y ése es sin duda la luz LED.

En 1879 Thomas Edison patentó la bombilla incandescente. Un invento que revolucionaría la vida diaria de las personas y que permaneció útil e imbatible durante más de un Siglo… Hasta 1993! Este año se desarrolla el LED de luz blanca. Tal vez no parezca tan importante, pero te voy a contar algunas características de esta luz:

1.- Tiene una vida útil de hasta 50.000 horas, es decir, puede durar unos 30 años si la encendemos una media de 4 horas al día. En otras palabras: dura 30 veces más que una lámpara incandescente o un tubo fluorescente, 25 veces más que un halógeno y 3 veces más que la de una lámpara de bajo consumo.

2.- Consume menos energía y la aprovecha mejor. Las ampolletas tradicionales, sólo aprovechan para iluminar el 10% de la energía que consumen. Es como abrir una botella de agua de dos litros, beberse un poco menos de un vaso y tirar el resto. Las LED en cambio aprovechan el 80% de la energía para iluminar, lo que además se traduce en un importante ahorro!

3.- No genera calor, por lo tanto no quema. Esto la hace más seguras para las piezas de los niños, por ejemplo.

4.- Es resistente a la humedad, a las vibraciones y a las altas y bajas temperaturas. Por eso podemos usar luces LED en jardines y terrazas o en piscinas.

5.- Es más segura y menos contaminante, porque no contiene mercurio y emite menos CO2 a la atmósfera.

Dentro de la familia de luces LED puedes encontrar formatos variados, como en tiras con adhesivo para que las puedas pegar debajo de una barra o en un mueble de cocina; en forma de ampolletas; en forma de tubo. Eso sí, en algunos casos requieren de una instalación específica.

Existen luces LED de varios colores. Si eliges una luz blanca recuerda que también hay una gama que va de los amarillos a los azules. La luz blanca-amarilla da sensaciones más cálidas y por eso se suele utilizar para livings, piezas, pasillos y baños, mientras que la luz blanca-azul es más clara, fría y cansa menos la vista, por eso se usa en garajes, oficinas, piezas de estudio o cocinas.

En decoración los LED se usan cada día más. Puedes usarlos para enfatizar muebles u objetos;

En exteriores son perfectos para iluminar un sendero de entrada a la casa o para darle un aire sugerente a tu piscina;

Si necesitas una luz permanente, que actúe como espantacuco en una escalera o pasillo los LED son una buena opción;

Y como tienen un ciclo de vida largo también son convenientes en zonas de paso continuo, en las que son muy frecuentes los encendidos y apagados a lo largo del día, como los baños y las cocinas. Ah! Y tampoco te olvides de ellos ahora que llega la Navidad!

PRODUCTOS (hay muchos!!!)